LA CULPA

 

"Si realmente me quieres no me dañes”

Y aclaro esta situación se puede aplicar a una persona (hermano, hermana, esposo, esposa, hijo, madre padre) o a una situación sea cual sea.

Me permito empezar hoy con esta frase, ya que muchas personas confunden el amor con la culpa, se escudan sobre un yo te quiero y deben estar ahí, cuando realmente lo que existe es remordimiento por lo que hice, por el dolor que cause, sin embargo, continúan haciendo lo que tanto daño hizo, metiendo el dedo en la llaga una y otra vez, haciendo lo mismo que hiciste para crear la herida inicial en la persona que dices querer.

Cuando se quiere no se daña, cuando se quiere de verdad hay un arrepentimiento verdadero del error cometido, un compromiso real de no volver hacer lo que lastimo y lacero el corazón de esa persona que dices querer.

Cuando se quiere se hace bonito, cuando se quiere lo que debemos intentar es hacer feliz a nuestra persona, hacerla, si claro, pero de felicidad, no de dolor, no de frustración, no de tristeza.

Por qué vivir fingiendo un amor o una situación solo para que tu corazón y tu mente se sientan aliviados, que egoístas somos de verdad.

Porque vivir a escondidas, porque no ser auténticos, porque no ser genuinos, la culpa carcome el alma, no solo del que la siente, también lo hace de esa persona que dices querer y que supuestamente con una actuación fingida quiere proteger.

Perdónate, cometiste un error, resuélvelo e independientemente como terminen las cosas, asúmelo, elimina la culpa, sigue adelante y no solo serás feliz tú, talvez la persona con la que tuviste la situación que te genero la culpa, también lo sea, claro siempre y cuando te aprenda a perdonar.

Consejos para aquellos que sienten culpa:

1-No debemos confundir el amor con la necesidad de aliviar nuestra propia culpa.

2- Reconoce tus errores.

3-Perdona y perdónate.

4-Cambiar tus acciones.

5-Recuerda buscar la felicidad del otro y la tuya misma eliminando de tu sistema la culpa.

   Vivir sin culpas, estar libre de ese sentimiento nos permite crear relaciones sanas y auténticas.